Debido a las nuevas tecnologías de comunicación, la población mundial forma una sola comunidad donde se comparten costumbres, experiencias, expectativas. A este fenómeno, Marshall McLuhan lo denominó Aldea global.
Estamos en una cultura global donde las ideas y valores transcienden las fronteras por los medios de comunicación, sin embargo, los valores culturales y los estilos de vida no se homogeneizaron totalmente sino que las culturas tienden a interactuar entre ellas.
El comercio internacional aumentó notablemente, lo que favoreció que llegue mercadería de casi todas las ciudades del mundo, lo que lleva también a la homogeneización de productos, hábitos de consumo y sistemas de comercialización.
La globalización es un proceso multidimensional, que genera cambios positivos (como desde el punto de vista tecnológico y productivo) y algunas consecuencias en el ámbito social. Entre las principales consecuencias negativas se encuentran:
- La aculturación, es decir, que las culturas pierden su identidad generando la unificación cultural.
- Rápida difusión del terrorismo internacional, el narcotráfico y la corrupción.
- Enfrentamientos entre productores y organizaciones defensoras del medio ambiente.
- competencia global.
- Refuerza las desigualdades entre los países centrales y periféricos.
- Las empresas transnacionales tratan de generalizar determinadas pautas de consumo y estilos de vida.
Estas consecuencias negativas han llevado al surgimiento de diversas organizaciones no gubernamentales y movimientos sociales que manifiestan su disconformidad ante la globalización. Estas organizaciones representan a grupos sociales que se sienten desprotegidos o marginados.
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